Visualiza por un momento el tejido empresarial de nuestro país. Hay compañías grandes, medianas… pero el 95,7 % de todo ese conjunto son las denominadas microempresas, las compuestas como máximo por 9 empleados. En España existen más de tres millones y el grueso fundamental lo constituyen las que no disponen de ningún empleado. Por sectores, los de más peso son el comercio minorista, la construcción y las actividades profesionales, científicas y técnicas. En un segundo grupo estarían las actividades mobiliarias y administrativas, el comercio mayorista, industria, transporte y almacenamiento.

Según el informe anual «La sociedad en red«, en su edición 2014, elaborado por el Observatorio Nacional de las Telecomunicaciones y de la Sociedad de la Información (ONTSI), los avances en Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC) de estas microempresas indican una “relación amorosa” positiva y creciente entre ambas . Y, a pesar de la crisis, se percibe una mejora de las infraestructuras, la conectividad, las herramientas y los usos. Aun así, hay mucho camino por recorrer e innovación que hacer.

En infraestructuras y conectividad, tanto el teléfono móvil como la conexión a internet siguen creciendo, aunque esta última va ralentizando su incremento. El 74,7 % utiliza el teléfono móvil con fines empresariales y el 65,7 % tiene conexión a internet. Sorprende que solo un 29,4 % de microempresas tiene página web de la compañía, en su mayoría las dedicadas al sector turístico y a la hostelería. ¡Una gran oportunidad para empresas de diseño web!!. El correo electrónico parece, sin embargo, menos prescindible: disponen de él más del 63 %.

Por sectores, las actividades profesionales, científicas y técnicas y el comercio mayorista están por encima de la media en disponibilidad de ordenador y de teléfono móvil. En el extremo opuesto se encuentran el comercio minorista y el transporte y almacenamiento. Estos sectores, sin embargo, registran mayor penetración de otras tecnologías como el GPS o la TPV.

En cuanto a herramientas, las aplicaciones más utilizadas en las microempresas son los navegadores de Internet y aplicaciones de ofimática. La penetración de sistemas operativos como Linux es mucho más baja y, el último lugar de utilización, lo tiene el procesamiento automático de información del tipo Solución de ERP -Enterprise Resource Planning- o CRM -Customer Relationship Management-, lo que indica el cambio de mentalidad que aún nos queda por hacer para colocar al cliente en el centro del negocio.

Atendiendo al uso que hacen de internet estas empresas destaca la búsqueda de información, seguida de la utilización como plataforma de comunicación y la obtención de servicios bancarios y financieros. En cuanto a redes sociales, las más utilizadas son Twitter, Facebook, LinkedIn y Youtube. Los sectores más activos son informática y comunicaciones (el 53,2%), hostelería y agencias de viajes (48%), comercio al por menor (31,9%) y actividades profesionales científicas y técnicas (28,3%). Y los que menos las utilizan son los dedicados a actividades inmobiliarias, administrativas y servicios auxiliares (19,4%) y construcción (17,2%).

Teniendo en cuenta estos datos, la migración hacia una economía digital parece imparable también por parte de las microempresas, lo que incluye acoger todos los beneficios de las nuevas tecnologías. ¿Se mantendrá en los próximos años esta tendencia alcista?